¿Es irónico no?
Es decir todos pasamos por ese amor adolescente que nos bajo la luna y las estrellas , que nos hizo orbitar sobre su constelacion haciéndonos sentir como una supernova tipo 1a , tan brillante , tan única...
Ese amor que de la nada hizo te convirtieras en una simple basura estelar para su constelacion , el que haya preferido irse asombrado por aquella estrella que estaba distante de el , pero sin embargo el al ser tan egoísta quería poseer .
Ese amor que nos construyó y al mismo tiempo nos derrumbo y justo cuando te encuentras navegando por alguna parte del universo deshecha sin ganas de volver a amar aparece una pequeña luz a cierta distancia que llama tu atención ...
Temerosa vas a acercándote ahí poco a poco y cuando menos lo esperas sus brazos espirales van succionandote hasta el arder de su núcleo , te das cuenta que no solo es una constelación más con la que tropezaste , si no una Galaxia , una con miles de millones de estrellas , cientos de planetas , llena de colores y decide ponerte no como una decoración más de sus vibrantes brazos espirales , si no que al fusionarse con tu sentir te vuelve parte vital de ella.
Son dos seres galácticos que le dan vida a la galaxia que si uno de los dos no está las estrellas empiezan a apagarse , los planetas comienzan a derrumbarse y poco a poco todo va despegandose.
Así de efímero es el amor , después de que vienen y te rompen el corazón llega alguien que vuelve a tomarte con todos tus pedazos rotos dispuesto a reconstruirte , dispuesto a sujetar tu mano y llevarte a conocer un amor real .
¿Realmente nos conformamos con solo ser estrellas de simples constelaciones?