EdithElviracolquirojas
El preludio de un ocaso (Poema en dos versiones)
El preludio de un ocaso (Décima espinela)
El preludio de un ocaso,
marcan las caricias frías,
la mortandad de los días,
la gelidez de su vaso.
La llegada con retraso
indica el desinterés:
¡Él ya no te ama!, ¿lo ves?
Si las rosas se murieron,
si de olvido se cubrieron;
murió el amor e interés.
Autora Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados
Versión Nro. 2
El preludio de un ocaso (Poema libre)
El preludio de un ocaso
quedan marcados
en el desgano y el desinterés:
en los besos fríos, en las caricia yertas;
en las palabras con sabor a nada.
Muere lentamente el amor
cuando no se riega el jardín con detalles.
Se aniquila sus ojos de ternura,
si no se le da tiempo, ni espacio.
El desamor,
no se puede tapar con un dedo.
El fuego de la pasión
necesita ser atizado,
para no quedar vacío, abandonado, sin alma.
Si murió el amor,
si sus ciros blancos ya no alumbran,
entonces que se consolide el ocaso,
y que se cierre la tarde
sin los reflejos del amado.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados