Eras poesía antes de empezar a escribirte,
mientras las luces parpadean en el fondo
y tú brillas en la noche estrellada.
Hay personas que valen mundos,
qué se pierden y generan espacios,
deberíamos orbitarlas, aprenderlas,
perdernos en sus profundidades
y aprender de cada parpadeo.
Éramos otra realidad,
ella era otra realidad,
perfecta y parpadeante,
perdidos frente al infinito.
Observando el vacío.
De: Víctor