Todos corren desesperados buscando refugio
Y así ocultarse de esta lluvia,
En mi lento andar no me importa mojarme
Siento las gotas como una caricia al alma
Fina y persistente cae sobre mi cuerpo
Que insistentemente suspira en un diluvio
De felicidad pensándote Cristina,
Mi alma mojada se sumerge en tus besos
Que detienen el tiempo, pero no la lluvia,
Empapado de tenues caricias producto de tus manos
Partí esta mañana bajo una llovizna intermitente,
Y me aferre al tibio calor de tus abrazos,
Bebo algunas gotas que impactan en mi cara,
Son resbaladizas gotas cristalinas
Como el sudor de tu espalda.
Llueve, llueve y no cesa,
No supe que temblaba, porque no tenía frio,
Temblaba de amor acoso?
Pensando en ti, en la distancia
Quise arropar cada rincón de tu cuerpo
Con mi corazón envuelto en llamas.
Coqueteaba tu mirada con la brisa de la lluvia
Y quede adormecido en tus pensamientos
Marcho lento bajo una llovizna de emociones
Profundas, que caen y bautizan
El amor que voy sintiendo.