Jhon Deivy Torres Vidal

HÁBITO DE INDECISIÓN

Ella y sus veinte mentiras.

Yo y mi única verdad, por no herirla.

Ella llorando, hundiendo sus lamentos

En mi oído arañado, tal vez solo fingiendo.

Quizá, en verdad, dolida. No sabría

Si sus lágrimas son ciertas o fingidas.

La duda y la sospecha por un lado

Y por otro, el afecto con sus hábitos,

Y en esa brega diaria, indefinida,

Van creciendo ataduras en la herida,

Se prolongan raíces de recelo

Que han fijado mi vida en sus terrenos.

Quiero elegir la hora en que me vaya

Sin importar ¡Por fin! lo que ella haga,

Sin importarme las respuestas luego

Ni las dudosas razones para hacerlo.

Es suficiente tanta desconfianza

Que a mi dignidad retuvo maniatada.