Si alguien me preguntara dónde empieza la felicidad,
le diría que empieza en ti.
Empieza en algo tan pequeño como tus pestañas y termina en múltiples lunares,
las líneas de tu sonrisa son el mejor camino para seguir.
Tus brazos son el bálsamo para no ahogarme en la marea de la vida,
Y tu voz la inspiración que dejo en el papel al escribir.