Ten para tus adentros mis nostalgias
y para tus sueños, mi anhelo,
toma para tus risas mis motivos
y para tus tristezas mis agravios.
Colmate de todo en mi senda
y tómate el tiempo en meditarme,
recoge para tus días mi cariño
y para tus frías noches, mis caricias.
Así, para ser feliz renuncia al día
y toma a la noche por testigo
y, para que me halles en tu mente
recoge para siempre mi recuerdo.
Bolívar Delgado Arce