Son las seis de la tarde
y reconozco que tengo ganas de…
ganas de ir a verte
ganas de perderte
ganas de conocerte
ganas de inventarte
ganas de olvidarte
ganas de fecundarte
ganas de convencerte
ganas de devorarte
ganas de desaparecerte
pero al ver que…
ver(?)
que puedo ver yo
si fui declarado miope crónico,
astigmático… pero sobre todo indiferente
que es la mayor ceguera descubierta
Y llegaste una tarde a abandonarme
quedándote callada ante mi llamada,
te fuiste haciendo mi vicio
y te fui construyendo un recuerdo,
convirtiendo mi lecho
en un monasterio consagrado a tu recuerdo
Y mientras sigo extrañándote
el hambre me sigue acechando
la locura me sigue revolcando
la tristeza me sigue seduciendo
la amargura me sigue consumiendo
Y en medio de este harén de celibatos
donde la esquizofrenia dosifica
cuantas cucharadas de fantasía
he de consumir al día
para poder excretar
la realidad que me gangrena