PERPETUOS EN LA MEMORIA
De fiesta viste la Luna,
mientras el Sol se desnuda,
para exhibir su esplendor.
Folklórico el Sol alumbra.
Mientras la Luna reposa,
en los brazos del amor.
En el semblante la pena,
y en los ojos el temor.
En los labios la condena,
y en el rictus el rencor.
En el aura que rodea,
la hierática visión.
El talento se arrincona,
en el fondo del dolor.
Así la mente se agrieta,
alejando la emoción.
La emoción de la belleza,
que anida en el corazón.
Y en las fisuras que dejan,
el odio y el desamor.
Se derrama la nostalgia,
que arrebata la ilusión.
Camino ahíto de piedras.
Como verdades sinceras,
en las que el rencor tropieza.
Mientras las salta el amor,
dando a la emoción más fuerza.
De puntillas se aproxima,
y de rodillas se humilla.
Cuando al afrontar el reto,
en sus comienzos claudica.
Sigue el reflejo al humano,
en su críptica apariencia.
En su aparente inocencia,
hace juegos de salón.
Pero el orgullo le ciega,
cuando entrega el corazón.
Y en un alarde de fuerza,
quiere doblar la razón.
La razón de su existencia.
Aprieta el viento de cola,
empujando hacia la meta,
al bajel que se retrasa.
Pero la mar le sujeta,
con su marina grandeza.
La pelea es desigual,
entre la mosca y la fiera.
Pero el insecto triunfa,
con su precaria destreza,
en su ínfima apariencia.
Cada paso es el que importa.
Cuando al ofrecer su impronta,
deja trozos de su piel.
Perpetuos en la memoria.
A.L.
http://alupego.blogspot.es
07/01/2019