Ivelisse T. Machín

Cuando amaneces

quiero que amanezcas a mi lado
concretamente no que te vires de espalda y bosteces
no que tu cuerpo se sumerja en la cama
y se agolpe en las mantas
no que la desnudez de tu cuerpo me sobrecoja
no que sueñes estar en otro sitio
en otra cama
no que exijas un café o tomes un café
no que preguntes por tu chaqueta
no que te afeites
no que pongas sobre la mesa unas monedas
no que hables de catástrofes de negocios
exactamente quiero que me mires a los ojos
que abras los ojos y permitas
al rayo de sol quedarse en tu pupila
hacer nido en tu carne
dibujar una sonrisa en tus labios
exactamente quiero tus labios
los besos de tus labios cuando amaneces
el sol sobre la piel roja que muerde
y hunde el puñal en mi espalda
quiero mi espalda después de tus labios
después de tus besos
y el sol que sale de la sangre
y tus ojos fijos en mis ojos
cuando amaneces
quiero el único lujo que puedo tener
la cicatriz de tu rodilla
y la certeza de tu gesto
algo sencillo como tu abrazo
no sé si entiendes
cuando amaneces
a mi lado
te quiero.