Noche vertical
donde hiberna el dragón negro
ávido sueño de la imagen sitiada
mediocre desnudez
que ya no nos despierta
ni sucede
sin el talento para soñar verbos
calco mi propio corazón
en el vuelo invertido
de la mariposa
como única respuesta
a la belleza inmóvil
de esta atmósfera marchitándose
me encaramo a los matices del aire
raíz afrodisíaca de las horas
donde me aprendo