Verano Brisas

PROXENETA DE ULTRATUMBA

Creo ambientes apacibles y muy cómodos

para enamorados que saben exigir lo suyo;

en noches enteleridas hago que su ejercicio

fluya cálido y gozoso, evitando que no rueden

sábanas y cobertores en barullo por el piso.

 

Los poderes que poseo son aún desconocidos,

pero intentan propiciarlos con una taza de té,

colocada junto al lecho donde ocurre la faena,

procurando con tal acto que yo beba mientras ellos

se dedican presurosos a sus mutuas complacencias.

 

Soy una esencia inmortal de la cultura amarilla,

que junto a mi compañera

influyo en los menesteres naturales de la cama,

pues prefiero más que nada incentivar las pasiones

donde dolor y tristeza puedan salir derrotados,

sobre todo, entre mujeres con futura descendencia.