Hoy la herida hizo sangrar a mi corazón
Una herida que lleva tu nombre
Qué con una estocada le partiste en dos
Y como ladrona de tumbas le robaste su amor.
Qué dolor tan inhumano me has dejado
No hay verso que consuele al poeta
Solo un gran vacío desde que te has marchado
Sin brillo en el cielo, sin luna ni estrella.
Más que una soledad en penumbras
Dónde mis manos desoladas se suicidan
Mis labios sin tu néctar se marchitan
Y mis ojos por el llanto se calcinan.
Y yo me pregunto, ¿por qué mujer?
¿Porque te fuiste de mi lado?
Si yo cada día te mostraba que te amo
Pero párese que no te bastaba con mí ser.
Y ahora vago sin otro rumbo más que la muerte
Condenado a siempre quererte y no tenerte
Con la tristeza a cuestas, con el dolor en el alma
Porque si no estoy contigo mi vida no vale nada.
< -- NeoSan -- >