Heliconidas

A veces...

~⌂~

Serenidad del cántaro incólume
que adorna de silencio-oro la abadía.

Unas mayólicas de Al Andalús
vienen a mí en sueños.

Camino por las ciudades de la luz.
Mi mente es una serpiente de lengua bífida.

Me sumerjo en mi ocultismo crepuscular:
Es el ceremonial de tu recuerdo-rito
que entumece mi tiempo en gerundios de cristal.

Todo está congelado y es tan bello.

Son las cinco caras de tu piel reflejada
en la pirámide de un sueño de cuarzo rosado.

A veces, cuando te has dormido,
aún suelo llorar por ti.