Por una callejuela camina un niño,
muy sucio y harapiento,
llorando por que está hambriento;
necesitando cariño.
En una vieja casita,
una madre llorando;
pues hoy día está recordando,
que murió su chiquita.
Y en una casa lujosa,
un Señor acostumbrado;
a llegar siempre mareado,
a pelearse con su esposa.
Mientras tanto una abuelita,
ve las horas pasando,
a sus hijos y nietos está esperando,
y se encuentra muy sólita.
Y así con una y otra pena,
muchos sufren día tras días;
no esperarían la alegría
si no fuera Noche Buena.
Y justo para ellos Dios ha querido,
para devolverles la confianza;
y traerles esperanzas,
en la tierra haber nacido.
Pues, es un Rey de Bondad
compartir quiere nuestro dolor;
pues nos quiere con amor,
esto mismo es Navidad.