Y quizás cada vez que coincidimos,
tú le llamas casualidad o resultado de una ecuación de Dirac,
yo le llamo destino, pero sin saber cómo, ni cuando, nuestros caminos estaban unidos.
Y daba igual las vueltas que nos haya dado la vida, daba lo mismo las veces que nos hayamos cruzado sin mirar,
ni como nos haya tratado la vida, sé que al final estarías tú…esperándome…
calmar mis heridas, para calmar mi alma, para llenar de color mis días grises,
con esa forma tan tuya de besar y sanar mis cicatrices.
Y quizás coincidimos…para caminar juntos o para deshacernos de los miedos y hacerle frente al futuro agarrados de las manos…
para gritarle al universo que por mucho que nos azote jamás conseguirá separarnos. Y
quizás coincidimos…y de los días y noches de lágrimas solo queda un recuerdo mínimo y vago,
que ya no duele y no esta presente, que ya no daña, que ya es cicatriz, que ya no nos atormenta el pasado…
que lo único para que sirve es y será para disfrutar de la vida a tu lado.
Y quizás coincidimos…para Siempre!