La mayor alegría para un poeta,
no son los diplomas, ni ver su nombre en vitrinas expuestas.
La mayor alegría de un poeta,
es ver volando sus versos llenos de paz y amor por el planeta.
Es sembrar flores de esperanza entre las piedras cansadas,
ser antorcha de justicia social en un mundo de diferencias marcadas.
Es dejar un legado de buen ejemplo para el mundo,
es luchar por los nobles valores con su pluma prodigiosa y su verbo fecundo.
La mayor alegría para un poeta,
es ser luz radiante que alumbra los corazones en tinieblas;
es ser fuente de consuelo para lágrimas desiertas.
Poetas del mundo,
¡Levantad el estandarte de la ilusión nueva!
Decidle al planeta:
Somos poetas de carrera
con el alma y pasión completa.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-derechos Reservados