Y en lo más profundo de aquel bosque , se encontraba un pequeño niño .
Rodeado de horribles monstruos que no le permitían escapar.
No tenía nadie que le ayudara , No tenía nada que sacara a esos monstruos del lugar...
Y este pequeño niño , por las noches , al ver a los monstruos sonreír , rompía a llorar .
Grita...
Quiere escapar , pero no puede , los monstruos se aseguraron de atarlo bien a sí mismo .
Un día , aquel niño , ya sin siquiera un ápice de felicidad en esos ojos azules , que estaban rojos de tanto llorar ...
le preguntó a uno de los monstruos :
-“¿porqué?”
Y el monstruo le miró, sin expresión alguna en su rostro , solo vio , a aquel pequeño niño desvanecer ...
El espejo rompió , y los monstruos desaparecieron del oscuro bosque .
Nadie se percató de que aquel pequeño niño había muerto en vida ...
Nadie vio cada día su sonrisa más rota .
Nadie vio , que los monstruos de su cabeza , aquellos que aumentaban al mirarse al espejo ,
se habían alimentado de su brillo ... hasta hacerlo morir.