De que me sirve que hayan, tantas flores,
si el amor que me alienta se marchita,
a la flor la contemplo más bonita,
hoy sus nuevos senderos, son mejores.
Su escenario se llena de esplendores,
su actitud a alejarme ya me invita,
un mundo de dolor me precipita,
a borrar por completo sus amores.
Su esencia va mezclada por mis venas,
un sol tan eclipsado ya no alumbra,
dejando sensaciones nada buenas.
Nadie muere de amor en la penumbra,
tu ser se fortalece con las penas,
y un horizonte nuevo se vislumbra.