El rumor de las aguas
el canto de las aves
el caer de las hojas
el croar de las ranas.
Son cosas que me dicen
que estoy allá en el bosque
donde siempre he querído
vivir tras el olvido..
Vivir por siempre inmerso
en mi gran soledad.
Como un anacoreta
o como un eremita,
lleno de incertidumbre,
sin odio, sin maldad.
La paz en él disfruto,
con gran serenidad,
lo bello se éste mundo,
lo hermoso, la verdad.
Pero vivr ajeno,
a las cosas mundánas,
sería como lejano,
sería, \"un por demás\".
Sería el Paraíso,
tan lejano y añorado,
sería como al pasado,
volver a regresar.
El pasado que siempre,
presente, me persigue...
El pasado que un día
sin lucha y sin porfía
debería de mi mente
poderlo desterrar.