AMIGO
Fuiste mi bastón, afectuoso amigo,
me tendiste tu mano salvadora,
permitiste a la luna encantadora
que con su bella luz me diera abrigo.
Nos dejaste muy joven, fui testigo;
testigo del dolor y la injusticia,
sufriste de la espada y la codicia;
ya no padeces más mi fiel amigo.
Brutal ataque se ensaño contigo,
mis manos no pudieron defenderte,
tu cuerpo se desplomo a un lado inerte
y lloro de dolor por tu castigo.
Hoy te confieso recordado amigo,
que el villano causante de tu muerte
es ahora también materia inerte;
hemos visto caer a tu enemigo.
Hoy te extrañamos respetado amigo,
caballero de buenas intenciones,
te envío desde aquí mis bendiciones;
sabes que pronto estaremos contigo.
Autor: Fabio Bohórquez Rodríguez
Registro No. 10-400-125
Dirección Nacional de Derechos de Autor.