A veces la quiero, a veces también...
Aunque no la entienda,
por más que lo intente,
y me pierda entre sus silencios,
que rebalsan tristeza,
y me pesen tanto
todas sus ausencias,
que me alejan de ella,
aunque a su lado esté...
A veces la odio, a veces también...
Porque se que me quiere
y no lo deja ver,
porque a veces escapa
de su boca un anhelo
de un beso que encienda
su alma y su piel,
y luego, de pronto,
se oculta de nuevo,
y aunque este a su lado
no le puedo ver...
A veces la extraño, a veces también...
cuando los silencios,
nos separan tanto,
que ya no nos vemos,
cada amanecer,
cuando ella se esconde,
cuando huye errante,
y aunque estemos juntos,
no puede volver,