Siempre rondando en mis pensamientos estás,
abrazándome , besándome, mirándome
y mi corazón comienza a galopar.
Siento tus ojos oscuros siguiéndome,
queriendo mi cuerpo desnudar.
Te miro y ahí los encuentro
y en el infinito me pierdo ya,
no porque sean lascivos
ni porque los atavíos me quieran arrancar,
sino porque en su profundidad
veo que yo te podría amar.
Te busco, te pienso y te miro,
sé que te puedo encontrar,
oculto tras aquella esquina
o navegando en tu amado mar.
Te beso, te amo
y en tus manos mi alma dejo
y me digo: \"¿acaso él me podría amar?\"