Cuanta gente se dirigen a direcciones similares
Sin darse cuenta la vida que lleva
Caminando sin parar, sin mostrar emociones
Sobre las hojas del invierno que se caen
Imprecisos los pasos que dan
Sin visualizar la distancia a la que van
Centrándose en sus pensamientos y quizá sueños
Para no mirar a su alrededor,
siguiendo su protocolo mental
Si tan sólo se vieran a los ojos
Observando esa luz que hay en nuestro interior
La vida no sería tan solitaria
Ni el amor tan veloz
Tantos corazones solitarios
Queriendo sin previo aviso
Regalando sonrisas, sin fijarse en su tristeza
Para confortar nos y darnos fuerzas
Tantas huellas en el camino
Una encima de otra, esparciéndose como arena entre los dedos
Sin dejar rastro,
Como los momentos y las personas que se van
Inesperados son los días en los que se suelen topar
Bendito sea el momento en el que dejes de alucinar
Tan solo pido que comprendas
Que la vida es un bumerán