Nhylath

Vida y ausencia

¡Dos vidas!...

Una, en proceso de gestación ...

Otra, a pocas horas de elevar

vuelo hacia la eternidad!

 

¡Una vida formándose 

en el vientre de su madre...

Otra, despidiéndose de la tierra

que lo vio nacer,

para reposar dulcemente

en el regazo maternal 

que lo espera en el cielo!

 

¡Una vida ansiando el gran momento

de ver la luz del universo;

y un Alma elevándose 

con sus albas alas

hasta el infinito!

 

¡Dos almas que se encuentran

en el mismo espacio etéreo 

para conocerse...

ya no hay tiempo de espera!

 

¡Dos rostros angelicales 

se hallan al unísono 

en la profundidad del ser,

en la profundidad de ese espacio,

donde nadie puede auscultar,

sino Dios!

 

¡Y Dios los bendijo!...

A Christopher,

cuarenta y cinco días después,

dándole luz para penetrar en el mundo 

e iluminar con su advenimiento 

el hogar bendito de sus padres...

Y a Martín, iluminando su Espiritu,

para que pueda contemplar 

eternamente el resplandor 

de su Divino Rostro!

 

¡Dos almas sensibles y maravillosas

se encuentran en ese

\"Espacio Divino \",

desde donde el \"niño lindo\",

le sonríe a su abuelito Martín,

un veinte de diciembre 

pidiéndole su bendicion!

 

¡.Y su madre, Eliana, lo siente así...

percibe esa hermosa sensación 

desde su bendecido vientre!..

Siente sus movimientos y

escucha la tierna voz de su hijo 

susurrándole al oído:

\"Mami, conocí a mi abuelito

en esta cálida cápsula

iluminada con el fulgor de su mirada,

bendiciéndome con mucho amor!

 

¡Y a escasos instantes del tiempo...

se reflejó en sueños...la unión...

de VIDA y AUSENCIA !...

 

¡Vente de diciembre, en sueños...

Veintidós de diciembre ,

rumbo al espacio celestial!

 

Nhylath