Si, te soñé anoche
y soñé que te tenia
entre mis brazos sin reproche,
y soñé que acariciaba
pues tu pelo con
mi mano que deseaba.
Y así, te soñé anoche,
fue pues de esos locos sueños
que se tienen sin pensar;
que acaricias pues
la nieve y volteas
y ahí esta el mar.
Y fue de esos tantos
sueños que el calor da por matar,
que volteas pa’tras
y enfrente y nunca
el sol ves donde esta.
Y así fue de esos
cuales sueños
que en ilusiones va a parar,
que despiertas aturdido
pues el reloj fue el del sonar.
Pero no olvides que
te soñé anoche,
aunque me pregunto sin cesar
si mientras yo te soñé anoche
quien ocupo el lugar.
-Juan Antonio Ayala H.-