EL ESPEJO QUE NOS MIRA
Los espejos,
que tras los ojos observan.
Solo el exterior reflejan.
El que cubre con complejos,
lo que de verdad anima.
Laberínticos senderos,
perdidos entre las tripas.
Emociones que se enredan,
entre ovillos de malicia.
Al despertar del ensueño,
donde los sueños dormitan.
La realidad vapulea,
las más sencillas partículas,
de emoción y de desidia.
Inundando sin tapujos,
cada segundo del día.
Bofetadas de razones,
que a la realidad obligan.
Se va engañando al espejo,
con afeites y sonrisas.
Mientras por dentro se juegan,
apasionantes partidas.
Muñequitos de guiñol,
manejados por las manos,
que dominan y adoctrinan.
Y unos sorbos de ilusión,
fabricada a toda prisa.
Espejos en el salón,
para mirarse de paso,
mientras suena la canción.
La canción que se abre paso,
entre los viejos recuerdos,
y que asaltan paso a paso,
cerebros y corazón.
Un cóctel donde se mezclan,
verdad, mentira y pasión.
Camina, siempre camina,
con los brazos extendidos,
buscando un sueño mejor.
Y en el espejo atrevido,
que osa mostrar lo mejor,
el vaho enturbia la imagen,
camuflando lo peor.
Jardines en la ilusión,
de bellas flores cubierto.
Como sonetos de amor,
que liberan los secretos.
Espejos que no permiten,
traspasar las realidades.
Pues brillantes vanidades,
oscurecen la razón.
Ocultando el interior,
donde viven las verdades.
A.L.
http://alupego.blogspot.es
11/02/2019