Montaña
Como elevada casi orgullosa,
esa que abrazar al cielo pareciera,
es astuta y veraniega del hombre,
cautelosa de pasión la hace ir a ciegas.
Serás un poco aventurera
de esas que salen a cazar…
el tonto, a ella le da igual
quieren su capricho alcanzar.
¡Oh altura tan imponente!
que desde abajo te observo,
no serás leal, pero eres ciervo
con flojedad en tu mente.
No sé de qué te vale la edad,
si te dejas atrapar con sutileza
en el físico no hay belleza
que al hombre pueda trastornar.
Es mentira, no es real,
quien busca con afán un objetivo,
detrás tendremos que valorar…
fuiste la mentira y no eres ni amigo.
Te ves alto y engreída puede estar ella,
equivocados ante lo justo y honesto,
no miran otra altura ¡que funesto!
mientras disfruto y sigo mi estrella.