MELANCOLÍA Y ANGUSTIA
Al incrustarse la melancolía
lenta y sutil en la mente.
Humeantes espirales llenas de congojas
se desgranan,
estrangulan la angustia del espíritu,
las que en la laringe dejan,
un sabor agridulce salpicado de soledad.
Entonces alzaré
un cáliz rebosante de inquietas penas.
Brindo a favor de la comedia carnavalesca,
que eclipsó la vida mía.
Al sentir la nostalgia anidarse en mis sienes,
cual sed quemante en las entrañas,
desvanece.
Melancolía de mis amores, que silente,
en las madrugadas a la par caminas,
bañada en las marejadas doloridas de mi llanto,
de sufrimiento infiltrado.
Escuchando hasta el cansancio,
el estribillo de tristeza de mi roto corazón,
perdido en el vacío del olvido.
Melancolía no me abandones,
ya que los dos registrados quedamos,
en el divino libro de sus encantos.
bambam