Y aúnque sé que no me quieres estoy para ti, para ser lo que temes volvamos a reconstruir, en semillas que en tierra fértil piensas, se van a podrir.
Y aúnque lo sé, estoy pendiente a una respuesta verbal que ocultas pero que sabes bien, no llega a ser sentimiento uno, sino cien.
Y aúnque sé que no me quieres, comprendo que el adiós de nuestro amor en ti tiene una pisca de color.
Y aúnque sé que no me quieres, aqui esta quien siempre supo decir: te esperare.