Pintare mi sombra de color ocre,
en amarillo tu figura,
y vestire de terracota tu nombre
sin que nadie me viera.
Y alli en la aldea, de madrugada,
habra primaveras.
Tal vez una noche de estas,
dibujaras mi sonrisa.
Yo siempre estare esperando
un vals que llore en mi ojal
danzando en tu silencio,
y el temblor de tus cabellos,
vibrara en el eco del alma,
con mi hombro que posa el sueño,
y mi corazon que te llama.
LUCIA