PROTECCIÓN
16 y 18 de febrero
I
Nuestro apreciado pariente, nuestro árbol
Mece su frondosa debilidad soltando hojas,
Y espera que su frescura y sombra recojas
Y se convierta en cuarto pétalo de trébol.
y al conseguir abundante y desbordable ato
las utilizaremos como migajas en sendero
marcándonos la huella de nuestro zapato.
Sabiendo que estamos perdiendo en tablero
Abuelo, madre. padre. tío o lejano pariente
recuerdan que trasladamos su fiel apellido
por eso les inquieta qué uno este perdido
con silbidos, garras y hasta con viejo diente
protegen a despistado e olfativo cachorro
de mañas y fantasías, de fácil conseguir oro.
.Fin
Luis Angel Castillo Aguirre
Derechos reservados // 18-02.2019 // Foto tomado de Red