Agradecido con Dios y con la vida
por poder dar otra vuelta al calendario,
y contar con un trabajo diario
sustento mío y de mi familia.
Por gozar de cabal salud
(y aparentar cierta lozanía)
sin ser ejemplo de virtud
mis hábitos y la dieta mía.
Por mis tres mayores bendiciones,
mis mas grandes motores,
que dan sentido a mi vida
como la música a las canciones.
Por mi familia y amigos
que estoicos y con firmeza
han sido fieles testigos
de mis alegrías y tristezas.
Por los grandes amores
que me han acompañado
y en su tiempo me han brindado
las mas grandes alegrías
(y los mas grandes dolores)
Por los tropiezos y caídas,
que ciertamente he tenido,
por lo que me han enseñado,
de las que mucho he aprendido.
Por esto y mucho más
me siento de Dios consentido,
el mas feliz mortal,
ampliamente bendecido.