El túnel llevo mis ansias
para estrujarlas en la sombra
y fueron pequeñas gotas
destiladas en palabras.
Le conté que la quería
buscando en sus arpegios
esos tonos de alegría
los versos caían llorando.
Una luciérnaga encontré
como linterna en las manos
siempre al miedo enrrostré
quitándole a ella el espanto.
Y al intenso final recurro
con su luz arrebatadora
entre la niebla sonriendo
buscamos feliz la aurora.