Mora en mi mente,
una extraña Belleza del Horror,
en dimensiones desconocidas
e históricas.
Y aquella Luz antigua,
condenada a imágenes y metáforas
oscuras, sedientas, hambrientas
que me carcomen
despiadadas…
Mora en mí,
la noción del imperturbable
Tiempo Innecesario…
y aquella Leyenda
que no recuerdas ni concibes,
escrita ya en Lenguas Muertas…
Mora en mí
esta explosión silenciosa,
y desgranada
en versos,
que no entiendes…
Mientras el odioso
Sol de este Verano
sin nombre,
es un puñado de polvo,
una puñalada artera,
desparramada , quebrada
en mi Ser,
que tampoco conoces..…
Mientras...
las aves rapaces
que sortean los Océanos,
escriben
junto a mí
y buscan solidarias
las contritas palabras
en un apagado firmamento,
estos versos tallados,
adheridos mohosamente
a pesados crepúsculos
y negadas auroras….
(que son inexplicables
y tampoco entiendes).
Patricia Aznar Laffont