¡Preciosa mujer!
Ven, no tardes demasiado.
He puesto dos sillas,
Una para mí, la otra para tí.
He contado miles de estrellas,
Y perdí todas las cuentas,
La llamé por su nombre,
Pero ella no responde.
¿Dónde te buscaría?
En el Orinoco o el Danubio,
En Namibia o en Siberia.
La he buscado,
Desde Las Pampas
Hasta Alaska,
Pero ella no responde.
¿Será que duerme encantada,
Dentro de los pétalos de una rosa?
Será que su tardanza,
Es un buen augurio.
El reloj pasa lentamente,
Ni en el Caribe,
Ni en Madrid,
La he encontrado.
La vi en el parque,
La vi en la estación,
La vi pasar de prisa...
Otro día en la biblioteca,
La llamé como lo haría
Romeo a Julieta,
Pero ella paso de largo
Y me dijo: Lo siento no te conozco.
Voy como gitano
De pueblo en pueblo,
Buscándola.
Y no puedo pensar
Que el día cuando por fin la encuentre,
Ya tenga anillo de esposa,
Y la llamen sus vecinos: \"Señora\"
Autor: Alex de Jesús