Sabiendo que la muerte, es cierta
Perdonar, a quien firmo la sentencia
Aceptar mi condena, a vida
Olvidar, tan solo, lo que no quiero
Querer, aunque no me quieran
Amar, sin poner excusas. Que por algo, el amor es ciego…
Y la muerte espera.
Además es posible que Oríon, no este tan lejos