Tu loco de atar
Nunca te hizo falta decir,
ni media palabra, para vivir en mi,
solo te basta con existir,
cerca de allá, aunque distante de aquí.
Esperando algún día escuches mi himno,
que por sobre todas las cosas te pertenece,
en el hablo de ti, una y otra vez,
otra vez y mil veces, volviendo a lo mismo.
llegará un día, vas a preguntarte:
a este hombre ?qué le pasa?
apuesto, nunca vas a imaginarte,
que de esta locura, tú eres la causa.
Si eres el personaje invisible y remoto,
con el que hablo en el escenario,
eres quien me hace comprobar a diario,
de músico, poeta y loco, todos tenemos un poco.
José Estrada