Te veré de día
y también de noche,
en cualquier momento
con mis ojos torpes,
y veré si alcanzo
a tu mano noble
y a los dedos finos
de la musa joven,
porque quiero verte
y gritar tu nombre,
mariposa triste
con tus alas dobles,
y si acaso veo,
entre sus colores
un mensaje alegre
estaré conforme...
Te veré, si acaso,
no sé cómo y dónde,
aunque tenga frío
y me vengan toses,
aguantando lluvias
temporal y soles,
y la gripe aceche,
con su garra y torre,
porque siento dentro
ese beso noble,
cual susurro impío
del oscuro bosque
que me atrae y atrapa
hacia el viejo roble,
con sus ramas fuertes
como brazos ocres...
\"...Te veré en mis sueños
como algún Quijote,
que a su Dulcinea
le entregaba un cofre...\"
Rafael Sánchez Ortega ©
23/02/19