Melancolía.
Si ha de caer la noche, me ha de perder la lluvia: he de perder tu nombre y el verso de la locura. Se ha de mirar envuelto el vate de la nostalgia: todo será siniestro, nada será esperanza.
Sólo seré el recuerdo de una mirada triste, sólo seré el silencio y ése que tú perdiste. Sin el celeste paso del ángel que abrió mi alma, he de girar muy alto, fuera de tu mirada.
Serás lo que nunca quise, seré lo que no soñaba: ambos seremos tristes, ambos seremos nada. Se ha de venir la muerte de la pupila injusta, esa que siempre enciende con su manía intrusa.
Si ha de caer la noche, me ha de perder la lluvia… y he de llegar al bosque de la palabra insulsa. Se ha de soñar la vida en lo que fue tu encanto, en lo que tú serías y en lo que fue mi llanto.
Sólo seré el recuerdo de una mirada triste, sólo seré el silencio y ése que tú perdiste. Sin este llanto vivo que hace que te recuerde, he de quedar tendido… y ha de ganar la muerte.