Disculpa, por no tener
un buen zapato que ponerme,
si ves que mi pantalón
no es de lo mejor,
o no es de marca,
si la camisa no es de mi talla
si no llevo calcetas o
si la corbata no combina
con el traje que traigo puesto.
Si mi vocabulario no es el más fino,
si no se como se toma una copa,
si no se húsar el servicio para comer,
si no se sentarme en la mesa,
si no me se comportar ante tu gente.
Perdona si me ves que estoy llorando,
perdona por ser pobre,,
por no vivir en una mansión
y por vivir en una humilde casita,
que es todo mi orgullo y mi gran amor.