Sus sales se han secado
en la vieja vertiente
solo sus rastros
consiguen verse.
La grieta del tiempo
succionando los años
han dejado un mapa
de la pared colgado.
Cuantas ideas han caminado
en las noches sin estrellas
en locuras arrastradas
en besos resecos de conciencia
Solo se sabe el volar incierto
en un precipicio lejano
han quedado sonidos
de un aletear reseco