Eres, mi amiga querida,
Un alguien tan especial,
Un apoyo tan cabal
Que parte, eres, de mi vida;
Y por ser mi consentida,
Mi compañera ideal,
De manera fraternal
Te comparto sin medida,
De mí, toda poesía,
Un abrazo y mucho más,
Un dechado de armonía
No pasajero y fugaz:
Gran fortuna y alegría
Y que no acabe jamás...