Escrìbeme una carta sin destino.
El viento detendrà la muralla
de palabras muertas que se callan
sabiendo lo que espero y atino.
Escrìbeme, buscarè yo el camino
que tengo grabado en la medalla,
complacido venzo a las batallas
y olvido en una copa de vino.
Escrìbeme, pìdele un gajo a la noche,
sin ella la luna tiembla de cielo
en tempestades de abismo y a oscuras
porque si tu me escribes aùn en el coche ,
que lleva tu nombre en papel caramelo,
temblarà la aurora en una locura.
LUCIA