Escribo espeso, en trazo grueso
voy vagabunda y valiente
entre versos ebrios y de poca monta.
Escribo sobre todo,
con retazo de dudas y barro en las manos.
Busco desmesurada
la rima en el ronquido de las calles
Entonces te miro, hago una pausa.
Para qué los sueños?
si es ahora la noche solo el estribillo
de días desvalijados.
Para qué los deseos?
sino para vivirlos en sueños.
Para qué la noche?
si es ahora un lienzo blanco
de un artista huérfano de inspiración.