Nadia R. Arano

Jamás pensé odiar al mar

Jamás pensé odiar al mar

Cuando me sentaba en la orilla de la playa

Y miraba las olas reventar en mis pies

Y disfrutaba su aroma, su color

 

Jamás pensé odiar al mar

Con el cálido atardecer en la arena,

El horizonte azul, el reflejo del cielo

Y su intensa inmensidad

 

Jamás pensé odiar al mar

Hasta que te conocí

Y es el mar, con su intensa inmensidad,

El que me separa de ti.