Aun puros, aun fuertes
vientos y cambios siguen vigentes
fuera en la interperie de siempre
con un refugio mellado
y un pequeño agujero bajo la nieve,
así camino, aletargando mi presente,
en esa continua lucha de convertir el hoy
en el ahora mismo.
No entiendo, como es esa proesa tan resistente,
aferrandose al piso y pidiendo silencio,
congelando el paso, cortando el camino
dejandome inerte.
Un momento de flaqueo,
el descanzo que quiere mi alma
y busca en las nubes esa razón para trascender,
pero la nieve a veces cubre el cielo
y confunde esos sueños vagos y ligeros,
tan lejanos y cercanos del sol que todo mueve,
y en la letania mi figura se desmaya
se deja abrigar ironicamente,
por el mismo brio cotidiano,
el miedo lentamente deforma
y crea una cuna, que se mece inmóvil
esperando el momento, para el sueño eterno.