En conflicto conmigo misma.
Con el mundo.
Contigo.
Con un tú que me atrapa.
Un yo que me aterra.
Un nosotros imposible.
Pensé que todo sería fácil.
Pero tú presencia escondía la mía.
La transformaba en otro yo.
No me reconozco.
Ahora. Sin ti. Ha vuelto la soledad.
Mentiría. ¡Mentiría!
¡Quiero empequeñecer tú dolor!
¡Olvídame!
Méteme en la caja de los recuerdos.
Hasta que se llene de polvo.
Y solo te quede echarme
En tu olvido. Para siempre.
Y que todo quede en un te quiero sin querer,
En un déjame queriendo.
En fin, reconozcámoslo:
Un nosotros imposible.