Surcan ráfagas de viento
levantando hojas caídas
en paisajes polvorientos
recuerdos de noches esquivas.
Agita el aire su manto
y lo enreda entre su pelo
y se mete en sus refajos
recortándose en su vuelos.
Y ella camina despacio
mientras su amante la mece
narrándola de palacios
ululando pa su mente.
A veces crea remolinos
para que ella sonría
y otras cuenta desatinos
de todo lo que le haría.
Ella ríe divertida
de saberse deseada
y se envuelve en melodías
de sonrisas y mañanas.
Y el viento baja despacio
para besarle en la cara
con caricias de sus manos
y alegrías a su espalda.
Vuela preciosa paloma
extiende ahora tus alas
que eres una gran persona
y te mereces todo y nada.
Todo de lo que tú quieres
y nada de lo que te aflige
sin pagar por aranceles
sin que te lo recriminen.