Éste es, el otro lado de la moneda.
Hoy que se recuerda a las mujeres que han muerto, luchado, peleado y pataleado por una igualdad de derechos; debo decirles algo: TODO ES CULPA DE LAS MUJERES.
La educación, los principios y valores; tanto los hombres como las mujeres las aprendemos de primera instancia de las MUJERES. Somos responsables hasta el infinito y más allá, de cómo son los hombres con nosotras, debemos preguntarnos para empezar: ¿Cómo fuimos educadas y cómo educamos? Si realmente educamos para respetarnos en todos los aspectos de la vida y no, de generar diferencias o discernimientos inadecuados en nuestros hijos.
Los hombre y jóvenes que hoy en día son abusivos, que tienen un comportamiento indiferente, intolerante y hasta violento en contra de nuestro género; pregúntenles, ¿qué les enseñaron las mujeres que los engendraron? ¿Por qué no son capaces de respetarnos?
¿Por qué tenemos que pelear, gritar y exigir igualdad y respeto? Cuando ni entre nosotras nos respetamos, no somos capaces de tolerarnos, de vernos como iguales, de AMARNOS.
En el marco de una conmemoración, en la que se supone deberíamos celebrar realmente una participación igualitaria y de respeto mutuo. Seguimos exigiendo cosas que nosotras mismas deberíamos poner en práctica; porque, si no te has dado cuenta de eso, déjame decirte que si sigues educando hombres y mujeres como dos seres que deben estar en competencia constante, nunca alcanzaras los objetivos que buscas.